Escritor
y editor gallego.
Casado con una mujer sueca y padre de dos hijos, pocas cosas le
quedaron por hacer. Viajero y lector incansable, mantuvo una íntima
amistad con Álvaro Cunqueiro, con Ramón Piñeiro -el gran ideólogo
galleguista de la posguerra- o con Gonzalo Torrente Ballester, a
quien frecuentaba a diario durante los veraneos en Galicia del
fallecido autor de La
saga/fuga de J.B.
Fue
desde periodista deportivo hasta diputado en el primer Parlamento
gallego, elegido como independiente con el PSG-PSOE. Catedrático de
Literatura, era presidente del Pen Club de Galicia y dirigía la
editorial Galaxia, fundada por los galleguistas en la posguerra como
un instrumento de resistencia frente al yugo cultural de la
dictadura.
Conversador
fuera de serie, siempre con un desternillante arsenal de anécdotas a
mano, tenía una aversión casi física al enfrentamiento y el
conflicto. 'Uno de sus mayores empeños era lograr que cualquier
discusión transcurriese con elegancia', recordaba el escritor Suso
de Toro. Esa tolerancia casi ilimitada le acarreó paradójicamente
algunos disgustos: desde el nacionalismo más radical se le señaló
en ocasiones como una especie de traidor.
En
Casares se producía una identificación casi total entre su
personalidad y su estilo como escritor. Tanto en su prosa como en su
vida trató de huir de la pompa y del exceso de retórica. Su
esfuerzo literario fue una pugna por la búsqueda de un estilo
sencillo, límpido, de una luminosa transparencia. Seguramente en el
fondo era un escéptico o incluso un pesimista, pero lo encubría con
una ironía radiante y amable y con una actitud vitalista. Sus
novelas se inscriben en la tradición del realismo, aunque muy
adaptado a su época y con un aliento cosmopolita -su escritor de
referencia era Albert Camus- que rompió en su día con el
costumbrismo de la literatura gallega.
Debutó
en 1967 con el libro de relatos Vento
ferido,
y alcanzó su gran éxito ocho años después con la novela Xoguetes
para un tempo prohibido,
testimonio de la resistencia antifascista en Galicia. También hizo
incursiones en el teatro y la biografía, para la que estaba
especialmente dotado, y mantuvo colaboraciones fijas en la prensa
diaria. Su última novela publicada, Deus
sentado nun sillón azul,
data de 1996. Aunque recibió en dos ocasiones el Premio de la
Crítica española y fue finalista del Premio Nacional de Narrativa,
su obra tuvo poco eco fuera de Galicia. Estos días estaba preparando
la salida de O
sol do verán,
novela construida a partir de una historia de amor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario