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La
severa y rigurosa abstinencia que antiguamente caracterizaba al
período de Cuaresma introdujo entre los cristianos la costumbre de
bendecir
el sábado santo todos los huevos recogidos desde el miércoles de
ceniza para repartirlos entre los amigos el día de Pascua.
En
algunos lugares se pintaban de rojo (en recuerdo a la sangre
derramada por...