La expresión "ser de cajón" significa "ser regular y corriente", y según las primeras ediciones del Diccionario de la Academia, "ser corriente y de estilo".
Empleamos este modismo para indicar que algo es obvio, evidente o está fuera de discusión.
El posible origen de tal dicho nos lleva al modus operandi de las antiguas imprentas, en las que se preparaban las publicaciones ordenando letras metálicas una a una (llamadas "tipos") hasta enlazar palabras y luego frases completas en unos soportes que las mantenían ordenadas. Posteriormente mediante la aplicación de la tinta y presión eran traspasadas al papel.
Las frases y/o palabras más empleadas eran guardadas en cajones para su posterior uso, por lo tanto eran frases "de cajón".
El empleo de dicha expresión ha cambiado su significado con el tiempo, llegando al conocido en la actualidad.