Sí, los Reyes Magos son tres: Melchor, Gaspar y Baltasar. Son tres
Reyes de Oriente que cada año el llamado Día de Reyes, traen los regalos
a los mayores y muy especialmente a los niños. Aunque según algunos
pudieron ser más de tres (los armenios, por ejemplo, suponen que fueron
12).
El Papa San León estableció que eran tres los Reyes Magos que fueron a adorar al niño Jesús guiados
por una estrella: Melchor, Gaspar y Baltazar. y que los regalos que
llevaban eran oro, incienso y mirra, significando: Rey y Dios Hombre.
Estos Tres Reyes son "magos" como su nombre indica. Según las
escrituras bíblicas llevaron al niño Jesús oro, incienso y mirra en el
pesebre de Belén donde nació. Los tres Reyes Magos venían de países muy
lejanos, pero fueron guiados por una señal del cielo, una "estrella
mágica", que años después los hombres de ciencia señalaron que pudo ser
un cometa.
Desde entonces, cada año, los tres reyes magos llevan regalos y presentes de paz y buena voluntad a los niños.
Los Reyes Magos, por tradiciones de algunos países, forman parte del pesebre junto a José, el niño Jesús y María.
LOS TRES REYES MAGOS Y EL SIGNIFICADO DE SUS REGALOS
El oro, el incienso y la mirra tienen cada uno un significado:
Melchor (Magalath), anciano de blancos cabellos y larga barba del mismo color, procedente de Europa; Melchor entrega la mirra, una sustancia rojiza aromática que es común en Medio Oriente y Somalia. Era muy valorada en la antigüedad para la elaboración de perfumes. La mirra es el símbolo del hombre.
Gaspar (Galgalath), el más joven y rubio de los tres reyes magos procedente de Asia. Gaspar entrega el incienso, una preparación de resinas aromáticas vegetales, a las que se añaden aceites de forma que al arder desprenda un humo fragante y un olor característico. El incienso en el símbolo de Dios. En muchas religiones el incienso se utiliza en los ritos religiosos.
Baltasar(Serakin), de raza negra, procedente de Africa, entrega el oro, el más precioso de los metales. El oro es el símbolo del Rey.
La descripción de los tres reyes magos fue hecha en el siglo XIV por un monje benedictino, Beda, que los describió en un códice, según hemos expuesto más arriba.
HISTORIA Y LEYENDA
La palabra «mago», proviene del elamita ma-ku-ish-ti, que ―pasando por el persa ma-gu-u-sha y por el acadio ma-gu-shu― llegó al griego como μαγός (magós y de ahí al latín magi, /mágui/ de donde llegó al español.
Si bien parece contradictorio que practicantes de la magia (severamente amonestada tanto en el Antiguo como en el Nuevo testamento) sean admitidos como adoradores de Jesús, hay que tener en cuenta que el término griego magós no era utilizado únicamente para referirse a los hechiceros. Se utiliza, en este caso, para referirse a ‘hombres sabios’ (así se los llama en diversas versiones de la Biblia en inglés) o, más específicamente, hombres de ciencia. De hecho, también poseían conocimiento de las Escrituras (Mateo 2:5-6). Es posible que estos magos pertenecieran a la religión zoroastra.
La figura católica de los Reyes Magos tiene su origen en los relatos del nacimiento de Jesús, algunos, fueron integrados de los evangelios canónicos que hoy conforman el Nuevo testamento de la Biblia. Concretamente el Evangelio de Mateo es la única fuente bíblica que menciona a unos magos (aunque no especifica los nombres, el número ni el título de reyes) quienes, tras seguir una supuesta estrella, buscan al «rey de los judíos que ha nacido» en Jerusalén, guiándoles dicha estrella hasta Jesús nacido en Belén, y a quien ofrecen ofrendas de oro, incienso y mirra.
fueron considerados originarios de Europa, Asia, y de África respectivamente. Sin embargo, el último libro escrito por el papa Benedicto XVI sobre Jesús de Nazaret, «La infancia de Jesús», destaca que los Reyes Magos probablemente no venían de Oriente, como se ha creído tradicionalmente, sino de Tartessos, una zona que los historiadores ubican entre Huelva, Cádiz y Sevilla (Andalucía, España).
Con respecto a los nombres de los reyes (Melchor, Gaspar y Baltasar) las primeras referencias parecen remontarse al siglo V a través de dos textos, el primero titulado Excerpta latina bárbari, en el que son llamados Melichior, Gathaspa y Bithisarea. y en otro evangelio apócrifo, el Evangelio armenio de la infancia, donde se les llama Balthazar, Melkon y Gaspard. Los nombres son además diferentes según la tradición siriaca.
La tradición más difundida cuenta que vinieron de Oriente, en número de tres, y que iban guiándose por una estrella (celebérrimamente conocida como La estrella de Belén) que les condujo hasta Belén. Allí buscaron al Niño Jesús recién nacido y le adoraron, ofreciéndole oro (representando su naturaleza real, como presente conferido a los reyes), incienso (que representa su naturaleza divina, empleado en el culto en los altares de Dios) y mirra (un compuesto embalsamador para los muertos, representando el sufrimiento y muerte futura de Jesús).
Parece ser que, solo por el hecho de que el relato evangélico indicara que trajeron tres dones (oro, incienso y mirra), se dio por sentado que eran tres los personajes que los traían. Aunque también en algún momento las distintas tradiciones han señalado que eran cuatro, siete y hasta doce.