Fue una genetista estadounidense (1861-1912).
Junto con Edmund Beecher Wilson fueron los primeros investigadores en descubrir las bases cromosómicas del sexo.
Estudiante muy dotada, Nettie Stevens completó en la mitad del tiempo
habitual sus estudios y se graduó como la primera de su clase en la
Universidad de Stanford. Continuó sus estudios de citología en Bryn
Mawr, la prestigiosa universidad femenina fundada en 1885.
En dicha institución Nettie Stevens conoció a Edmund Beecher Wilson,
jefe del departamento de Biología y al que sería su sucesor, Thomas Hunt
Morgan.
Se doctora en 1903. A través de la observación de
microsomas de insectos, descubrió que los cromosomas en algunas especies
son diferentes según los sexos. Por medio de sus investigaciones
descubrió el cromosoma ‘Y’, tras lo cual dedujo que la base cromosómica
del sexo depende de la presencia o ausencia de dicho cromosoma.