Durante los siglos XVI y XVII las posesiones y las flotas españolas
eran los principales objetivos de la piratería, pero con el
debilitamiento del poder hispánico en el siglo XVIII y la aparición en
el Caribe de las colonias inglesas, holandesas y francesas, estos
consiguieron su objetivo, interrumpir el comercio de Europa con América,
era la “Edad de Oro” de la piratería. No sería hasta que el rey Jorge I
de Inglaterra emitiera un edicto en 1717 para acabar con la piratería
ofreciendo el perdón a los que abandonaran sus fechorías. Nombró a
Woodes Rogers, antiguo corsario, gobernador de las Bahamas, y con una
importante flota logró dispersar a los piratas allí concentrados
haciendo caer uno a uno, a todos los filibusteros. Su fama ya sería
imperecedera pero también se les rodeó de muchos mitos, algunos ciertos
pero otros falsos.
¿Existían los tesoros ocultos en las islas?
Muy pocos eran los que escondían en lejanas y ocultas islas desiertas
el botín obtenido, aunque tras publicar la novela "La isla del Tesoro"
de Robert Louis Stevenson en 1883, se extendió el mito. Hay gente que
todavía busca los tesoros ocultos de Henry Morgan en varias islas de las
Bahamas o del legendario tesoro del capitán Kidd.
¿Mutilados y tuertos?
Expuestos a sufrir graves heridas en los combates, lo más frecuente era
que perdieran alguna parte de su cuerpo. Tenían incluso un sistema de
compensación para los lisiados en combate.
¿Abordaban grandes barcos o pequeñas naves?
En contra de lo que se piensa, la mayoría de piratas saqueaban pequeños
barcos mercantes, tripulados con pocos y pobremente armados marineros.
El botín solía consistir en el propio barco y poco más. No obstante, las
flotas compuestas de varios barcos piratas saqueaban naves mucho más
grandes. Es el caso del Fortune, buque de guerra francés que fue
capturado por el pirata Bartholomew Roberts en 1720.
¿Vestían elegantemente?
Básicamente su atuendo era como el de cualquier marinero aunque con
alguna variante: chaqueta azul corta sobre camisa de cuadros, pantalón
largo de lona, chaleco rojo y un pañuelo. Aunque siempre había algún que
otro pirata más “fino” con chaleco y sombreros de seda, por supuesto
robados.
¿Idealistas libertarios o vulgares bandidos?
Se
movían principalmente por el botín aunque la mayoría de piratas fueron
marineros rebelados contra la disciplina de sus capitanes. Este es uno
de los motivos de que distribuyeran siempre las riquezas de forma más o
menos equitativa. Se regían como una hermandad y hubo muchas comunidades
gobernadas por piratas como los Libertatia en Madagascar; la Cofradía
de los Hermanos de la Costa en isla Tortuga, y la República de los
Corsarios en Nassau.
Los últimos piratas:
- Barbanegra: su
nombre real era Edward Teach y sería el gobernador de Virginia con una
flota capitaneada por Robert Maynard quien lo acorralara en aguas de
Carolina del Norte y acabara matándolo en 1718.
- Calico Jack: se
llamaba en realidad John Rackham y se hizo famoso por su bandera negra
con una calavera y dos sables cruzados. Se le capturó cerca de Jamaica,
juzgado en Kingston y muerto en la horca en 1720.
- Bartholomew
Roberts: el más efectivo y profesional. Capturó 400 barcos hasta que los
británicos lo sorprendieran en el golfo de Guinea mientras sus hombres
se emborrachaban. Murió en combate, era el año 1722.
Hubo DOS
MUJERES pirata, Mary Read y Ann Bonny, que formaban parte de la
tripulación de Calico Jack. Ann. amante de Jack, se camufló entre la
tripulación vistiéndose de hombre. Allí coincidiría con Mary, que
travestida pasó inadvertida entre todos los hombres del barco. Ambas
mostraron gran valentía en el combate hasta que fueron hechas
prisioneras cerca de Jamaica. Fueron condenadas a muerte pero alegaron
estar embarazadas. Tras comprobar que no mentían, Mary fue llevada a
prisión, donde murió, y Ann fue trasladada a Carolina del Sur donde
vivía su padre, un rico hacendado.